Según un estudio realizado por Gallup, el 60% de los trabajadores no comprometidos con su puesto laboral muestran una mayor probabilidad de cometer errores en su trabajo diario.

Por otro lado, el 40% de los empleados con una capacitación inadecuada o nula son más propensos a irse en el primer año de trabajo.

Mientras que el 33% de los empleados renuncia a sus puestos de trabajo en busca de nuevos retos y mejores oportunidades de desarrollo profesional.

Ante estas encuestas y estos números, es necesario como empresa pensar en la importancia del desarrollo profesional y personal para los empleados.

En la siguiente nota, desarrollaremos esta temática y una de las soluciones más elegidas ante esta problemática.

Por qué es importante el desarrollo profesional y personal

El desarrollo profesional dentro de una empresa se refiere al proceso de adquirir habilidades, conocimientos y competencias relevantes para el crecimiento y avance de una carrera dentro del entorno laboral. 

Implica la mejora continua de las capacidades de un empleado a lo largo del tiempo, con el objetivo de aumentar su efectividad en el trabajo y su potencial de progreso.

Para las empresas, invertir en el desarrollo profesional de sus empleados puede ser beneficioso, ya que les permite contar con un personal más competente, adaptado a los cambios y con un mayor compromiso con la organización. 

Además, fomenta un clima laboral positivo, impulsa la innovación y ayuda a retener y atraer talento.

Los beneficios del desarrollo profesional para los empleados son diversos, ya que les brinda la oportunidad de ampliar sus conocimientos, desarrollar nuevas habilidades, mejorar su rendimiento en el trabajo actual y prepararse para roles de mayor responsabilidad en el futuro. 

Esto puede aumentar la satisfacción laboral, la motivación y la retención de los empleados.

Qué incluye el desarrollo profesional

Puede incluir una variedad de actividades y oportunidades, como programas de capacitación, cursos de educación continua, mentoría, participación en proyectos desafiantes, rotación de puestos, asistencia a conferencias y talleres, entre otros. 

Estas iniciativas pueden ser organizadas por la propia empresa o pueden ser impulsadas por el empleado para su crecimiento personal y profesional.

A continuación, un listado de diversos formatos de desarrollo profesional dentro de una empresa:

 

  • Capacitación interna: la empresa organiza sesiones de capacitación interna donde los empleados pueden aprender nuevas habilidades, adquirir nuevos conocimientos específicos o mejorar sus competencias existentes.

 

  • Cursos de educación continua: la empresa proporciona apoyo para que los empleados puedan realizar cursos externos, asistir a conferencias o workshops relacionados a su campo de trabajo, con el objetivo de actualizar sus conocimientos y habilidades.

 

  • Evaluaciones de desempeño y retroalimentación: las evaluaciones regulares del desempeño brindan la oportunidad de recibir retroalimentación constructiva sobre fortalezas y áreas de mejora, lo que permite a los empleados enfocarse en su desarrollo profesional de manera específica.

 

  • Participación en proyectos especiales: se brinda a los empleados la oportunidad de participar en proyectos desafiantes o innovadores que les permitan ampliar sus habilidades y conocimientos mientras trabajan en colaboración con otros profesionales.

Por supuesto que las empresas pueden personalizar, adaptar y reorganizar las diferentes maneras de desarrollo profesional para que sea provechoso para el equipo de trabajo.

Sin lugar a dudas, existe una gran variedad de formatos y maneras de impulsar el equipo de empleados para nutrir sus conocimientos y habilidades, como así también su incentivo en seguir aportando a la organización.

Entrenamientos corporativos, la opción más elegida

Los entrenamientos corporativos son una de las opciones más elegidas por las empresas para el desarrollo profesional de sus empleados debido a una serie de beneficios que ofrecen. 

Alkemy cuenta con entrenamientos corporativos demandados por grandes empresas, las cuales buscan cuidar y acompañar el crecimiento de sus empleados a través de la formación continua y específica.

Algunas razones por las cuales los entrenamientos corporativos son ampliamente preferidos:

Relevancia y adaptación

Estos entrenamientos están diseñados específicamente para abordar las necesidades y desafíos del negocio y la industria en la que opera la empresa. 

Estos programas se pueden adaptar para satisfacer las demandas únicas de la organización y sus empleados, centrándose en los conocimientos y habilidades requeridos en el entorno laboral específico.

Alineación con la cultura y valores de la empresa

Los entrenamientos corporativos pueden ser diseñados para reflejar y reforzar la cultura, los valores y las políticas de la empresa. 

Esto ayuda a establecer una coherencia en la forma en que los empleados entienden y aplican los principios y estándares de la organización en su trabajo diario.

Conocimiento interno y experiencia 

A menudo dichos entrenamientos son facilitados por profesionales internos o expertos de la industria contratados por la empresa. 

Esto significa que los empleados pueden beneficiarse de la experiencia y el conocimiento específico de su propia organización, lo que les permite obtener información y perspectivas directamente relevantes para su trabajo.

Estas son algunas razones por las cuales los entrenamientos corporativos internos fomentan el desarrollo profesional del equipo de trabajo. 

Y tú, ¿qué tipo de entrenamiento corporativo implementas en tu compañía?